Hoy, hablamos del agua micelar y sus ventajas, el porqué de utilizarla y como utilizarla.

Es una solución liquida de moléculas que se disponen formando micelas que contienen una estructura bipolar, lo que significa que atraen y repelen el agua al mismo tiempo. Para eliminar la suciedad y la grasa acumulada en el rostro de una forma nada agresiva para el cutis, sin frotar ni aclarar. Por tanto, para la limpieza diaria (tanto de día como de noche), aunque con unos beneficios incorporados: hidrata, mitifica, cierra poros y calma. Ya no sólo como desmaquillante, lavar todos los días tu cara con agua micelar mejorará tu apariencia al eliminar las células muertas y al mejorar la eficacia de cualquier tratamiento cosmético que vayas a utilizar después. La ausencia de ingredientes irritantes como colorantes, perfumes, parabenos, jabones o alcohol, convierte al agua micelar en un producto que protege de manera especial las pieles sensibles, atópicas o con tendencia reactiva. Los ingredientes principales que componen la solución micelar son agua tratada o purificada, pero pueden contener otras sustancias con propiedades hidratantes, humectantes, antinflamatorias o astringentes. El agua micelar es un producto indicado para todo tipo de pieles, aunque es verdad que dependerá de los ingredientes, será mejor o no, para el tipo de piel de cada uno.  Tras su uso, tu piel no necesita aclarado, pero sí se recomienda terminar tu rutina de belleza con tu crema hidratante habitual con factor de protección. Aplicarlo por la mañana con unos algodoncitos antes de maquillarte, sus propiedades (las micelas) actúan como imanes que equilibran el pH y tonifican la piel. Por la noche, úsalo para desmaquillar tu rostro, hidratar y tonificar tu piel. No olvides aplicar a continuación tu serum y tu crema nutritiva. ¡Los resultados son sorprendentes! El agua micelar es un excelente aliado de las pieles apagadas y cansadas. Ayuda a recuperar la vitalidad y aporta al rostro más luminosidad. Las pieles con rojeces suelen reaccionar muy bien con al agua micelar. Este producto es un clásico en las farmacias por su acción calmante, que actúa a la vez de tónico de belleza, sin riesgo de irritar la piel. En cambio, si tu piel es mixta con tendencia grasa, humedece un algodoncito y haz hincapié en la zona T (frente, barbilla, nariz) para eliminar el exceso de sebo y conseguir un maquillaje a prueba de brillos. Cuando sientas tus ojos hinchados y cansados, un poco de agua micelar te ayudará a descongestionarlos, eliminar el estrés y la tensión del día y recuperar la vitalidad en esta zona. El procedimiento es el mismo: humedece un algodón y pásalo suavemente por tus ojos un par de veces. Los sentirás más relajados.

Uso del agua micelar como desmaquillante o limpiador facial.

Humedecer un disco de algodón con agua micelar y aplicarlo con suavidad primero en un ojo, y con el lado opuesto del algodón, limpiar el otro ojo. Realizar el mismo procedimiento aplicando la loción micelar en la frente, las mejillas, la barbilla y el cuello. Como desmaquillante, aplicar el agua micelar humedeciendo un disco de algodón para cada ojo y dejar actuar durante dos minutos para que las micelas atrapen el maquillaje y otras impurezas. Pasados los minutos, arrastrar los algodones presionando con suavidad para eliminar el maquillaje.

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