Hola familia!. ¿Cómo estéis? Hoy queremos darte las claves para que la relación entre tu piel y el sol sea sana, beneficiosa, sin peligros y sin miedos.

Dar consejos para todos es bastante complicado, ya que no tenemos todos el mismo tipo de piel. Porque unas las tenemos claras, sensibles, con pecas, otros mas morena o negra.
Nuestra piel tiene melanina que ayuda a la pigmentación y por ello nos bronceamos. Cuanta mas pigmentación tiene tu piel, mas protección natural tiene, aunque ojo no es por eso que no la debemos cuidar.

Horas centrales
Seguramente ya lo sabes a que nos referimos cuando hablamos de horas centrales…. Por supuesto que hablamos de las famosas horas que no se debe tomar el sol. Son entre las 12h y las 16h, las horas centrales recomendadas por sanidad.
Pero oye, si aprovechas para dormir una siesta y que dura hasta las 17h tampoco no pasa nada… que tu piel te agradecerá ese sueñecito y el sol de las 17h no dañara tu piel.

No abuse de la exposición solar
Todos sabemos el tiempo aproximado que tardamos en quemarnos cuando no nos hemos puesto protección, si este tiempo son 10minutos, multiplica este tiempo por el factor de tu protección solar o SPF, esto te guiará un poco, si no lo sabias. Además, el tiempo de exposición al sol deberíamos ir aumentándolo gradualmente.
Así nuestra piel se irá acostumbrando progresivamente, consiguiendo tener sus propias defensas. Siempre usando la protección adecuada, preferiblemente en movimiento y nunca más de media hora al día.

Hidrata tu cuerpo y tu piel
De la misma forma que debes beber mucho agua, tu piel también necesita hidratación. Debido a la exposición solar y las altas temperaturas, la piel suele tener una mayor tendencia a la transpiración y a la pérdida de agua, lo que produce deshidratación. Por ello, es conveniente reforzar la hidratación durante esta época.
Ya sabes que cualquier actividad al aire libre requiere una buena hidratación, tanto por dentro como por fuera.

Y antes de exponerte al sol…
Por si te cabía alguna duda, los productos con alcohol, como perfumes y desodorantes no son buenos aliados de tu piel. Y menos todavía si vas a estar bajo el sol del verano. Evítalos, ahora más que nunca, porque podrían salirte manchas oscuras en la piel, muy difíciles de eliminar a posteriori.

Aplica el protector solar de forma abundante
La eterna duda es cuánta cantidad de crema tenemos que aplicar, ya que si aplicamos poca cantidad, el índice de protección solar SPF se reduce. Seguro que te quedas corto siempre, y la extiendes sin parar, te recomendamos que repitas la aplicación cada dos horas y cada vez que te bañes.

No te olvides hidratarte después del sol
Aunque te dé pereza, es fundamental para que la piel recupere la hidratación, suavidad y flexibilidad. Conseguirás calmar la piel y la ayudarás a repararse.

Aliméntate de forma adecuada
Los alimentos que nos ayudan a tener un bronceado saludable son los que contienen betacarotenos, los cuales encontramos en las frutas y verduras de color amarillo, naranja y rojo, como la frambuesa, zanahoria, la cereza, el melocotón o el tomate. ¡Aprovecha las frutas y verduras de la temporada! No hay nada mejor.

Así que ya sabes, tanto si lo que te gusta es relajarte al sol, hacer deporte en la playa o en la montaña o no te queda más remedio que correr tras los niños en la piscina queremos que sepas que también puedes beneficiarte de las excelentes propiedades del sol sin perjudicarte.
Feliz verano!!